Los espolones óseos espinales pueden causar una serie de síntomas. El signo más común es el dolor de cuello o de espalda. Esto puede deberse a articulaciones facetarias inflamadas, nervios espinales comprimidos o músculos irritados. Muchas personas experimentan un dolor sordo y localizado al estar de pie o al caminar, junto con sensaciones de hormigueo que llegan hasta los brazos o las piernas. Los síntomas específicos pueden variar según la ubicación de los espolones óseos problemáticos.
Por lo general, los síntomas de los espolones óseos empeoran con la actividad física y mejoran con el descanso. Por ejemplo, una persona que tiene un espolón óseo en la parte baja de la espalda puede sentirse mejor cuando se inclina sobre un carrito de compras o un bastón.
Síntomas raros del espolón óseo
Según la ubicación de un nervio comprimido y el nivel de compresión presente, un espolón óseo puede producir síntomas neurológicos. Algunos de los cuales pueden ser graves. Además de irradiar dolor y sensaciones de hormigueo en las extremidades, la compresión del nervio espinal puede causar debilidad muscular progresiva que puede conducir a problemas de movilidad.
En casos muy raros, los espolones óseos pueden causar síntomas potencialmente mortales. Por ejemplo, el síndrome de cauda equina (CES) es una afección poco común pero grave que requiere atención inmediata. CES ocurre cuando un haz de nervios situado en la base de la columna vertebral (la cauda equina) se comprime severamente. La cauda equina, que transmite señales, controla los músculos de las piernas y proporciona sensibilidad a la parte inferior del cuerpo, y también controla la función de la vejiga y los intestinos.
Los siguientes son síntomas raros de espolones óseos que constituyen una emergencia médica:
- Incontinencia vesical o intestinal. La disfunción de la vejiga/intestino, que es la principal señal de alerta de la CES, puede manifestarse en forma de retención urinaria, necesidad de esforzarse para orinar, una sensación inusual o falta de sensibilidad al orinar, flujo urinario deficiente o pérdida de control rectal.
- Anestesia en silla de montar. CES puede causar una pérdida de sensibilidad en la región del sillín. Esto incluye la ingle, las nalgas, los genitales y la parte superior interna de los muslos.
- Dolores agudos o punzantes en las piernas. La compresión de la cauda equina puede provocar dolor del nervio ciático, que puede experimentarse como un dolor agudo y caliente que desciende por la parte posterior de los muslos y hacia la parte inferior de las piernas y los pies.
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