Una visión general
Un disco abultado puede afectar cualquier parte de la columna causando dolor y otros síntomas que pueden dificultar el disfrute del día a día. Si bien un disco abultado en la columna cervical (área del cuello) no es raro, la gran mayoría de los estadounidenses que padecen esta afección degenerativa experimentan síntomas relacionados con un disco abultado en la columna lumbar (área lumbar). Hay una explicación bastante simple de por qué la parte baja de la espalda es más susceptible a una lesión de disco que otras áreas de la columna.
Los discos de la columna sirven como amortiguadores para la columna vertebral, soportando el desgaste diario, y la parte inferior de la espalda está sujeta a más presión que otras áreas porque tiene que soportar una mayor parte del peso total del cuerpo. Esta presión adicional hace que la columna lumbar sea una candidata más probable para una protuberancia o hernia de disco, ya que el deterioro natural del disco se produce durante el proceso de envejecimiento. Más específicamente, el 95 por ciento de los problemas de disco ocurren en los segmentos L4-L5, que son las vértebras más bajas de la columna lumbar.
Síntomas de disco abultado
Un disco abultado ocurre cuando un disco espinal debilitado se somete a presión y el núcleo interno similar a un gel empuja contra la pared externa y hace que se deforme. Muchos discos abultados no producen síntomas perceptibles y no requieren tratamiento. Sin embargo, si la porción del disco que se ha extendido más allá de sus límites normales entra en contacto con la médula espinal o la raíz nerviosa adyacente, pueden aparecer una variedad de síntomas incómodos, como:
- Espasmos musculares
- dolor localizado
- Debilidad muscular
- Entumecimiento
- Hormigueo
- Dolor y otros síntomas que se irradian a lo largo de una vía nerviosa a otras áreas del cuerpo
- Opciones de tratamiento
La buena noticia es que la mayoría de las personas que experimentan dolor lumbar debido a un disco abultado pueden superar sus síntomas a través de un plan de tratamiento específico que incluye terapias no quirúrgicas. La fisioterapia para desarrollar los músculos que sostienen la columna vertebral, los medicamentos para reducir la inflamación y la atención quiropráctica para ayudar a mantener la alineación adecuada de la columna son solo algunas de las opciones que pueden producir resultados duraderos. Perder el exceso de peso, practicar una mejor postura y evitar actividades que puedan ejercer una tensión indebida en la parte inferior de la espalda también son importantes si desea permanecer sin dolor.
Lo que BEST Health System puede hacer por su
Si ha seguido un plan de tratamiento conservador durante varias semanas o meses y continúa experimentando un dolor debilitante, es posible que desee consultar con su médico acerca de la cirugía de columna para un disco abultado. Si bien la cirugía de columna abierta ha sido una opción común en el pasado, BEST Health System ofrece cirugía de columna mínimamente invasiva que a menudo es clínicamente apropiada y ofrece muchas ventajas en comparación con los procedimientos abiertos de cuello o espalda. Si desea saber si es candidato para nuestros procedimientos ambulatorios, ¡estaremos encantados de ayudarle!
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