A veces, las personas que experimentan dolor en el cuello o la espalda pueden sentir algún tipo de bulto o hinchazón cuando tocan el área adolorida. Esto les hará preguntarse si eso significa que tienen un disco abultado. En estos casos, es posible que el dolor se deba a un disco protuberante, pero no es posible detectar el disco protuberante tocando el cuello o la espalda. Si siente una protuberancia cuando se toca el cuello o la espalda con la punta de los dedos, es probable que sea el borde óseo de las vértebras o posiblemente un espasmo muscular. Los discos espinales que sirven como amortiguadores para las vértebras están ubicados demasiado lejos de la piel para que pueda detectarlos con la punta de los dedos.
Para obtener un diagnóstico preciso de disco abultado, deberá consultar con su médico. Le preguntarán acerca de sus síntomas y actividades recientes. Aunque es probable que realicen un examen físico que puede incluir tocar el área adolorida de su cuello o espalda, su médico no esperará un disco deteriorado con las yemas de los dedos. Por lo general, se necesita una resonancia magnética para identificar un disco abultado.
Síntomas de un disco abultado
Un disco abultado es un disco que se ha deteriorado como resultado de una lesión o del envejecimiento natural. La capa externa dura del disco se ha debilitado y sobresale hacia el canal espinal que alberga la médula espinal. Este tipo de degeneración del disco es bastante común y con frecuencia no causa ningún síntoma. Sin embargo, hay casos en los que un disco que sobresale invadirá la médula espinal o un nervio adyacente. Esto puede causar irritación e inflamación que, a su vez, puede provocar varios síntomas, entre ellos:
- Dolor intenso y rigidez en el sitio del nervio afectado, generalmente en el cuello o la espalda baja
- Dolor, entumecimiento, hormigueo y debilidad muscular que se irradia a los brazos o las piernas
- En casos raros, pérdida del control de la vejiga o del intestino; cuando esto ocurre requiere tratamiento médico de emergencia
Sus opciones de tratamiento
Una vez que se haya diagnosticado su disco abultado, es probable que su médico lo aliente a seguir tratamientos conservadores. Esto puede incluir compresas frías y calientes, ejercicios de estiramiento y medicamentos antiinflamatorios. Muchas personas experimentan un alivio adecuado de sus síntomas con este tipo de remedios. Sin embargo, otros pueden experimentar poco alivio o sus síntomas pueden empeorar, lo que los lleva a considerar la cirugía como una opción de tratamiento.
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