Puede ser sorprendente saber que una gran parte del tratamiento de la columna vertebral degenerativa implica actividad física y ejercicio regular. De alguna manera, esto puede parecer contradictorio porque cuando experimenta dolor de cuello o espalda prolongado, participar en estas actividades puede ser incómodo. Sin embargo, el ejercicio aprobado por el médico puede mejorar la fuerza y la flexibilidad de la columna, lo que podría ayudar a aliviar la presión de los nervios espinales pinzados que a menudo son la fuente de los síntomas.
Cinco ejercicios recomendados para el tratamiento degenerativo de la columna
Si bien el ejercicio puede ser muy eficaz como parte de un plan de tratamiento de la columna vertebral degenerativa, no todos los ejercicios son apropiados. En términos generales, se debe evitar cualquier actividad física que ejerza una tensión adicional sobre la columna vertebral o que implique una flexión, torsión o levantamiento excesivos. Los médicos y fisioterapeutas recomiendan ejercicios de bajo impacto como parte del tratamiento degenerativo de la columna. Aquí hay cinco ejemplos rápidos:
- Para caminar. Este ejercicio es extremadamente fácil de incorporar a su rutina diaria y puede tener un impacto profundo en su salud. Muchos pacientes disfrutan de comenzar la mañana o terminar la noche con un agradable paseo por el vecindario para acelerar su ritmo cardíaco, estimular su metabolismo y disfrutar del aire libre.
- Ciclismo. Dar un paseo en bicicleta o subirse a una bicicleta estacionaria es una excelente manera de hacer ejercicio sin forzar la columna vertebral. Asegúrate de que la bicicleta o bicicleta estática te permita mantener una postura cómoda.
- Nadando. La natación es uno de los mejores tipos de tratamiento degenerativo de la columna porque ejerce una tensión mínima sobre la columna y trabaja todo el cuerpo. El agua tibia de la piscina puede incluso ofrecer beneficios hidroterapéuticos.
- Máquinas elípticas. Muchas personas disfrutan de las máquinas elípticas como una alternativa a las cintas de correr y otros equipos de gimnasio porque estas máquinas incorporan resistencia al entrenamiento, lo que hace que el ejercicio sea más interesante y también se enfoca en diferentes músculos del cuerpo que los equipos de cardio estándar.
- Yoga, pilates y otras técnicas de estiramiento. Los estiramientos suaves pueden ser extremadamente beneficiosos para mejorar la fuerza central y hacer que los músculos que sostienen la columna sean más flexibles.
Manténgase en estrecha colaboración con su médico e infórmele sobre cualquier nueva forma de ejercicio que esté intentando. Escuche a su cuerpo y deténgase ante la primera señal de malestar excesivo o sobreesfuerzo.
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