Espolón óseo espinal
La perspectiva de la cirugía y el siguiente período de recuperación pueden ser una fuente de ansiedad para las personas con espolones óseos espinales. Sin embargo, muchas personas con esta afección no requieren cirugía para encontrar un alivio duradero. Muchas personas con espolones óseos en la columna no experimentan síntomas perturbadores, y aquellos que sí los experimentan a menudo pueden controlar su malestar con medidas conservadoras.
Si necesitará considerar la cirugía depende de los detalles de su diagnóstico: dónde se encuentra el espolón óseo, si está comprimiendo una raíz nerviosa cercana o la médula espinal, qué tipo de síntomas está experimentando y qué tanto afectan su vida. Si bien un médico puede evaluar su situación y discutir sus mejores opciones, las siguientes pautas pueden ayudarlo a determinar si puede evitar la cirugía de espolón óseo espinal por completo.
¿Sus síntomas interfieren con su rutina regular?
Un espolón óseo espinal no necesariamente significa que experimentará síntomas incómodos. Muchas personas que tienen espolones óseos ni siquiera saben que están allí. Si bien un espolón óseo a menudo acompaña a los dolores y la rigidez de la artritis, los síntomas debilitantes solo se desarrollan si la protuberancia comprime una raíz nerviosa o la médula espinal. Estos síntomas pueden ser lo suficientemente leves como para no impedir que alguien trabaje o participe en su rutina diaria. Sin embargo, la cirugía podría ser una consideración si experimenta síntomas que dificultan tener una buena calidad de vida.
¿Ha explorado completamente las opciones conservadoras?
Los síntomas leves a moderados a menudo se pueden controlar a través de opciones conservadoras, como analgésicos recetados o de venta libre, ejercicio o inyecciones espinales, o fisioterapia. Los tratamientos alternativos como el ajuste quiropráctico, el masaje terapéutico o la acupuntura también pueden ser beneficiosos. Si estas opciones funcionan actualmente para usted, es posible que pueda continuar sin necesidad de recurrir a la cirugía de espolón óseo. Sin embargo, si los métodos conservadores no brindan suficiente alivio del dolor o los enfoques que alguna vez fueron efectivos ya no controlan sus síntomas, podría ser el momento de evaluar sus opciones quirúrgicas.
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