Diagnóstico del dolor de espalda

¿Cómo se diagnostica el dolor de espalda?

Si tiene dolor de espalda, es importante obtener un diagnóstico adecuado antes de comenzar cualquier tratamiento. Tratar la afección incorrecta puede ser una pérdida de tiempo y dinero, e incluso es posible que sus síntomas empeoren mientras tanto. Por estas razones, es probable que su médico realice varias pruebas para identificar con precisión la causa de su malestar.

Exámenes físicos para diagnosticar el dolor de espalda

El primer paso en el proceso de diagnóstico suele ser un examen físico. Después de tomar su historial médico, revisar sus síntomas y examinar su columna vertebral, un médico puede realizar varias evaluaciones clínicas. Esto puede incluir un rango de movimiento, fuerza muscular y pruebas de reflejos y flexibilidad, entre otros.

Escaneos de imágenes

Una vez que un médico tiene una idea de lo que podría estar causando su dolor de espalda, el diagnóstico puede confirmarse con una o más pruebas de imágenes, pero no siempre son necesarias. Las tomografías computarizadas, las resonancias magnéticas, las gammagrafías óseas y las radiografías son opciones potenciales que pueden proporcionar vistas detalladas de su columna vertebral y ayudar con un diagnóstico.

inyecciones de diagnóstico

A veces, un médico puede usar inyecciones de diagnóstico en lugar de (o además de) imágenes de diagnóstico. Algunas opciones incluyen:

  • Inyecciones de bloqueo nervioso
  • Inyecciones de articulaciones facetarias
  • Inyecciones en la articulación sacroilíaca (SI)

Su médico puede usar una inyección para proporcionar confirmación si cree que un nervio espinal o una articulación específicos están causando su dolor. Estos procedimientos implican la inyección de un agente anestésico de acción rápida directamente en el nervio o la articulación en cuestión. Si esto alivia inmediatamente el dolor, es probable que la causa sea el nervio o la articulación en cuestión.

Puede comenzar con el tratamiento una vez que tenga un diagnóstico oficial de dolor de espalda. Las inyecciones terapéuticas, los medicamentos, la fisioterapia y los ejercicios son opciones posibles. La cirugía también puede ser una opción, aunque no es necesaria para todas las situaciones. A menudo, su médico puede recomendarle terapias conservadoras después de un diagnóstico de dolor de espalda, con la cirugía guardada como último recurso.

Opciones de tratamiento

Si bien el dolor de espalda a veces puede desaparecer por sí solo, es mejor consultar con un médico si experimenta molestias durante varios días consecutivos. Retrasar el diagnóstico y el tratamiento puede permitir que el dolor empeore, por lo que es importante buscar atención médica de inmediato para encontrar el alivio que necesita.

En BEST Health System, creemos en un enfoque conservador de la cirugía. Nuestros cirujanos certificados por la junta siempre intentan ayudar a los pacientes a encontrar la opción de tratamiento más efectiva y menos invasiva. Nuestros procedimientos mínimamente invasivos permiten incisiones más pequeñas, menos dolor y un tiempo de recuperación más rápido, todo de forma ambulatoria. Comuníquese con BEST Health System para aprender más hoy.