espondilosis

La espondilosis es un término común y general que se usa a menudo para describir varios tipos de degeneración espinal. Específicamente, esta condición puede usarse para explicar la degeneración relacionada con la edad de los elementos anatómicos en el cuello o la espalda. Dicho esto, es importante comprender que la espondilosis no es un diagnóstico clínico, sino un término descriptivo. Para identificar el origen exacto de su dolor crónico de cuello, dolor de espalda u otros síntomas relacionados con la columna, es esencial que visite a un médico para determinar qué está causando su malestar.

Causas

La espondilosis describe el desgaste gradual de la columna vertebral con el tiempo. La aparición más común de espondilosis se encuentra en la región lumbar (inferior) de la columna vertebral. La columna lumbar es responsable de soportar y estabilizar la mayor parte del peso del cuerpo. A medida que el cuerpo aumenta de peso y tiene años de doblarse y torcerse, los componentes de la columna lumbar, como las vértebras, los discos y las articulaciones, comienzan a deteriorarse lentamente.

En algunos casos, la espondilosis es el resultado de otra afección de la columna, como la artritis de la columna, que hace que las vértebras o las articulaciones de la columna se deterioren. Su médico puede determinar con precisión la causa de su espondilosis al revisar sus pruebas de imagen.

Cuando los componentes de la columna comienzan a degenerarse, pueden ocurrir otras afecciones de la columna. Las condiciones comunes asociadas con la espondilosis incluyen:

Hernia de disco
Estenosis espinal
Hernia de disco
espolones óseos
espondilolistesis
Enfermedad degenerativa del disco

Opciones de tratamientos conservadores

Muchas veces, los pacientes con espondilosis pueden encontrar alivio con terapias y tratamientos conservadores. En su mayor parte, a menos que la afección sea demasiado grave, los médicos comenzarán el tratamiento a través de estos métodos de tratamiento conservadores. Los tratamientos comunes incluyen:

Analgésico
Fármacos anti-inflamatorios no esteroideos
Terapia de frío y calor
mejora de la postura
Terapia física
Cambios en el estilo de vida

Síntomas

La mayoría de los casos leves de espondilosis son asintomáticos. De hecho, la mayoría de las personas mayores de 70 años tienen espondilosis sin saberlo. Dado que la causa más común de la espondilosis es el proceso natural de envejecimiento, la mayoría de las personas nunca experimentan síntomas además de dolores y molestias menores e infrecuentes ocasionalmente.

Sin embargo, los casos más progresivos de espondilosis pueden provocar rigidez y dolor en la espalda. Algunos pacientes pueden experimentar dolor al doblarse o torcerse, así como un dolor que se irradia hacia la nalga y la pierna. Si experimenta alguno de estos síntomas, comuníquese con su médico para analizar las opciones de tratamiento conservador y quirúrgico disponibles para usted.

Diagnóstico

Un diagnóstico de espondilosis solo debe ser realizado por su médico de atención primaria o un especialista calificado. Esta condición requiere un proceso de diagnóstico completo para descartar otras condiciones con síntomas similares. Si el dolor crónico de cuello o espalda lo está alejando de las personas que ama, obtener el tratamiento que necesita para una vida plena y activa depende de un diagnóstico adecuado. Tener una mejor comprensión de los procedimientos de diagnóstico puede ayudarlo a participar mejor en su tratamiento y volver a la vida que se ha estado perdiendo.

El profesional de la salud comenzará con una descripción general de su historial médico para saber si usted o los miembros de su familia han tenido problemas de cuello o espalda en el pasado. Se cree que la genética juega un papel en el desarrollo de condiciones degenerativas de la columna como la espondilosis. Su médico también querrá saber si ha tenido otras condiciones de salud o cirugías previas.

La inflamación y la rigidez asociadas con la espondilosis pueden afectar los movimientos normales y saludables de su cuello o espalda, por lo que evaluar su rango de movimiento también puede ser parte de su evaluación. Su médico también puede revisar los reflejos de sus manos y pies, ya que las respuestas reflejas deficientes pueden indicar compresión o daño en los nervios.

Opciones de tratamiento quirúrgico

Si las opciones de tratamiento conservador son ineficaces después de varios meses, puede ser candidato para la cirugía. Si su médico sugiere que explore los procedimientos quirúrgicos, hay muchos disponibles, incluidas las operaciones mínimamente invasivas.

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