Pequeño desgarro anular

Pequeño desgarro anular | MEJOR

Un desgarro anular puede ser solo un pequeño desgarro en el disco espinal, pero puede causar grandes problemas para sus actividades diarias. En muchos casos, algunas personas nunca notan que tienen un desgarro anular, pero para las personas que experimentan el dolor y los síntomas que a veces puede causar esta afección, este pequeño desgarro no es nada que pasar por alto.

Un desgarro anular es un pequeño desgarro en la pared exterior, o anillo fibroso, de un disco espinal. Los discos de la columna cumplen un papel importante como amortiguadores contra el desgaste diario, amortiguando las otras partes de la columna. Si el desgarro anular es pequeño y asintomático, y no causa molestias perceptibles, es probable que existan opciones de tratamiento conservador que puedan tratar el desgarro. Sin embargo, si el contenido interno rompe el disco al empujar a través del desgarro y escapar hacia el canal espinal, a menudo pueden aparecer síntomas dolorosos debido a la irritación y compresión del nervio. Los desgarros anulares son más comunes en la columna lumbar, ya que es la parte de la columna que soporta la mayor parte del peso del cuerpo.

El dolor de desgarro anular puede ser agotador mental y físicamente, lo que hace que se pierda las actividades regulares que disfruta. Las cosas que antes eran fáciles, como caminar o correr, ahora se han vuelto demasiado dolorosas. Si está interesado en obtener más información sobre los pequeños desgarros anulares, permita que esta guía lo ayude a navegar por las diferentes causas, síntomas, procedimientos de diagnóstico y opciones de tratamiento.

Causas

La causa más común de un desgarro anular es una combinación del deterioro natural de la columna que ocurre con el envejecimiento y el aumento de la presión sobre el disco espinal afectado. Con la edad, es inevitable alguna forma de deterioro de la columna. Los discos de la columna a menudo pierden algo de su elasticidad y contenido de agua y se vuelven más susceptibles al daño. Si bien los músculos que sostienen la columna vertebral ayudan a evitar una presión indebida sobre un disco debilitado, existen factores que pueden aumentar las probabilidades de que se produzca un desgarro anular. Incluyen:

Obesidad
Postura pobre
Agacharse o levantar objetos pesados con frecuencia
Actividades de alto impacto
El consumo de tabaco

Además de estos factores de riesgo, una lesión traumática también puede causar un desgarro anular, pero esta es una fuente mucho menos común en comparación con la degeneración natural.

Opciones de tratamiento

Tras el diagnóstico, su médico generalmente recomendará probar métodos de tratamiento en el hogar durante varias semanas para ver si sus síntomas pueden reducirse. Algunas de las opciones de tratamiento de desgarro anular que su médico puede sugerir se pueden intentar desde la comodidad de su hogar, que incluyen:

Ejercicios de estiramiento y fortalecimiento dirigidos
Analgésicos y antiinflamatorios de venta libre
Terapia de frío/calor
Modificaciones de estilo de vida
Descanso

Si un paciente ha probado estos esfuerzos conservadores y no ha notado ningún resultado, puede ser candidato para la cirugía. Aunque su médico puede recomendarle una cirugía de columna abierta, BEST Health System ofrece opciones de tratamiento alternativas y no invasivas.

Diagnóstico de desgarros anulares

Si cree que puede tener un desgarro anular, un médico debería poder darle un diagnóstico correcto. El proceso de diagnóstico generalmente comienza con un resumen de su historial de salud, seguido de algún tipo de imagen. Una resonancia magnética es uno de los métodos más comunes utilizados para diagnosticar un desgarro anular. Sin embargo, las resonancias magnéticas no detectan todos los desgarros anulares. En este caso, el médico puede emitir un discograma de TC para seguir observando.

Síntomas

Se puede desarrollar una variedad de síntomas como resultado de un desgarro anular. Algunos de estos síntomas dependen de la ubicación y la gravedad del disco desgarrado, y otros simplemente varían de una persona a otra.

El dolor crónico de cuello o espalda es el síntoma más común de un desgarro anular. Sin embargo, es importante mencionar que cuando se rompe un disco, el proceso en sí no siempre es doloroso. De hecho, algunas personas tienen un disco desgarrado y nunca lo saben. En cambio, el dolor causado por un desgarro anular generalmente es el resultado de que el núcleo interno del disco se filtra hacia el canal espinal y comprime un nervio o una raíz nerviosa. Dado que los nervios espinales son increíblemente sensibles, incluso una presión leve puede provocar un dolor crónico intenso.

Esta compresión nerviosa también puede causar síntomas neurológicos, como sensaciones de hormigueo y debilidad muscular. A veces, estos problemas se localizan en el sitio de la compresión, pero en otras situaciones, viajan a lo largo del trayecto del nervio afectado. En el caso de un desgarro anular cervical, estos síntomas pueden irradiarse a través de un brazo o una mano. Para un desgarro anular lumbar, pueden viajar a través de una pierna o un pie.

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